Por su parte la nimbosilva, de los faldeos montanos orientales, es fundamental reservorio hídrico, ya que la densa vegetación actúa como una esponja; manteniendo fijada y condensada la humedad de las nubes o estrato casi constante de nubes llamado baritú.
También cumple función importantísima de reserva de agua dulce de montaña, el conjunto de nieves eternas en las alturas superiores a los 3500 msnm.
Prácticamente la totalidad de las aguas pluviales originadas en la ladera oriental de las Cumbres Calchaquíes y la Sierra del Aconquija aportan sus aguas al río Salí, uno de los dos más importantes del NOA (Noroeste Argentino), este río, conocido como Río Dulce en la mayor parte de su curso es el eje vertebrador de la provincia de Tucumán desde tiempos antiguos, en el límite entre las provincias de Tucumán y Santiago del Estero se ubica el bastante extenso embalse de Río Hondo que contiene las aguas que le aporta el río Salí y sus caudalosos afluentes principales, tales como el Gastona, el Marapa, el Río Chico, San Francisco, Mixta, etc.